El Tribunal Penal Uno concedió la excarcelación extraordinaria solicitada por la defensa de Hugo Dante “Willy” Ríos (31), quien ayer al mediodía recuperó la libertad e inmediatamente se trasladó hasta la localidad de Campo Viera, donde tiene fijada su residencia. “Inmediata liberación”, cita textualmente la orden judicial que benefició al hijo del intendente de Campo Viera, Juan Carlos Ríos. Desde el 5 de diciembre pasado estuvo detenido en la Unidad Penal II sentenciado a 18 años de prisión por el secuestro y violación de la estudiante Silvia Andrea González (15), cuyo cadáver fue hallado el 18 de octubre del 2001.
En consecuencia, Willy Ríos apenas permaneció 18 días tras las rejas, un lapso menor al que demandó el desarrollo del juicio oral y público que se extendió durante un mes completo.
Tal como anticipó El Territorio en su edición de la víspera, la semana pasada sus abogados presentaron un recurso de excarcelación extraordinaria basada en “cuestiones de salud” y la “buena conducta” exhibida por su cliente durante los años que permaneció en libertad como imputado en la causa.
Paralelamente, venían realizando intensas gestiones para lograr su traslado a la misma clínica psiquiátrica donde ya estuvo alojado entre 2003 y 2008 con aval de la Justicia.
Incluso, en los últimos días familiares y allegados dejaron trascender su satisfacción porque daban como un hecho que pasaría las fiestas en el centro asistencial. Por ello, la resolución judicial de ayer sorprendió gratamente incluso a los más íntimos.
Si bien la fiscal Estela Salguero de Alarcón denegó el pedido de la defensa, para los magistrados hubo elementos para hacer lugar al recurso y ordenar la libertad del acusado, al menos hasta que se resuelvan los planteos de casación que podrían demandar varios años. Ante la importancia del caso, en la víspera el Tribunal Penal sesionó a pleno presidido por Francisco Aguirre, secundado por José Pablo Rivero y Lilia Avendaño. Participaron el secretario Benjamín Armoa, la defensa de Ríos y la fiscal, quien explicitó sus reparos a la medida adoptada.
Además de las constancias de buena conducta, los jueces habrían considerado cuestiones clínicas y psicológicas avaladas por certificados médicos. Por ello, a entender de su abogado, la salud del condenado se hallaba en serio riesgo dentro de la cárcel, ya que era objeto de presiones e intimidaciones por parte del resto de la población.
De esta forma, pasado el mediodía Willy Ríos se despidió de sus compañeros de celda, incluido el posadeño Bertoldo Neumann que cumple una condena por doble homicidio. Lo aguardaba su hermana Andrea y un amigo, con quienes se trasladó hasta su casa en Campo Viera.
En sus primeras horas en libertad recibió la visita de allegados, varios de los cuales compartieron sus impresiones a través de las redes sociales.
La decisión judicial también despertó airadas críticas en dicha localidad, desde donde anticiparon la realización de una movilización para los próximos días en desacuerdo con la excarcelación del hijo del intendente.
“Es un terrible abuso”
Consultada al respecto, Bertolina Maciel, la madre de Silvia Andrea González, graficó que “fue un baldazo de agua fría, como que nos escupan en la cara. Primero esperamos trece años para el juicio y que haya una condena, pero ni estuvo 20 días preso y le soltaron. Tengo mucha bronca y dolor”.
En diálogo telefónico con este diario, Maciel no salía de su asombro ante la liberación de quien fue acusado por el secuestro y violación de su hija.
“Ayer recién (por el lunes) leyeron los fundamentos de la condena y hoy le sueltan. Es un terrible abuso lo que están haciendo, pero no vamos a bajar los brazos. Vamos a ir a hablar con los jueces, tendremos que hacer marchas y pedir ayuda a los organismos de Derechos Humanos, porque al final, el que tiene plata siempre cae bien parado. No puede ser que los pobres siempre queden callados ante la injusticia”, reflexionó indignada. Todavía sorprendida por la excarcelación, opinó que “en el juicio quedó bien claro lo que hizo cada uno y la responsabilidad de Ríos en el caso de mi hija. Por eso le condenaron a 18 años de cárcel, pero estuvo menos de un mes y sale. Muchos pensaban que le iban a mandar otra vez a la clínica, como después del primer juicio, pero que quede libre ya es colmo de las injusticias y no me entra en la cabeza”.
Excepción inédita
Durante el juicio, la defensa de Ríos no pudo demostrar fehacientemente que el día de la desaparición de la víctima el muchacho asistió a su trabajo y al colegio.
La testigo Norma Beatriz Ríos, en tanto, declaró que en la tarde del 11 de octubre del 2001 lo vio ingresar a un bar junto con Silvia Andrea y las hermanas Fabiana y Marina Cantero. Más tarde salieron las hermanas y fue Ríos quien regresó por la noche en compañía de Marciano Benítez y entre ambos subieron a la víctima en un auto.
Por otra parte, según declaró Mirta Núñez -que en 2001 fue profesora de Willy Ríos-, la hermana mayor de éste le pidió por favor que diga que el día de la desaparición de Silvia Andrea fue al colegio. “No puedo porque sé que ese día no fue al colegio”, le respondió.
Además de Willy Ríos, sentenciado a 18 años de prisión, por el caso Silvia Andrea también fueron condenados Marciano Benítez (52) y Fabiana Cantero (32).
Benítez fue condenado a prisión perpetua por los delitos de “privación ilegítima de la libertad, acceso carnal abusivo calificado y homicidio calificado”. Benítez ya estuvo preso ocho años por el mismo caso; mientras que Cantero fue imputada como partícipe necesaria en la “privación ilegítima de la libertad” y fue sentenciada a tres años de prisión, aunque la pena se dio por cumplida con los ocho años que ya purgó por la misma causa.
En el primer juicio, realizado en diciembre del 2003, Ríos fue acusado y detenido hasta el 2008, lapso que permaneció recluido en una clínica privada de esta localidad. Por ello, recién en 5 de diciembre pasado pisó por primera vez una cárcel, aunque sólo estuvo 18 días tras las rejas. Según los plazos legales, el hijo del alcalde viereño debería purgar en prisión al menos siete años de los 18 impuestos para poder acceder a la libertad condicional, aunque en la víspera los magistrados le otorgaron una excepción inédita en el ámbito local.
