(territoriodigital.com) El documento sostiene que "ningún efectivo puede entrevistarse con la prensa sin una autorización previa de la Jefatura".
Mediante una circular emitida la semana pasada, la Jefatura de la Policía de Misiones prohibió al personal brindar cualquier tipo de información a los medios de comunicación, sin previa autorización de la superioridad a través del departamento de prensa.
Se trata de una medida polémica que ya generó malestar en el ámbito periodístico, ya que impide el normal desenvolvimiento de los trabajadores de prensa en temas policiales de interés para la comunidad.
En los últimos días los medios de comunicación vieron limitado el acceso a la información oficial. “No podemos hablar con la prensa. Comuníquense con la Jefatura”, indicaron en las diferentes comisarías, sin brindar demasiados detalles.
En la víspera, El Territorio accedió a una copia de la citada circular general, fechada el 24 de abril pasado, con el número 11/14.
En ésta, la Jefatura de la Policía ordena que “ningún personal policial hallase autorizado a realizar entrevista con medios de prensa, sin autorización de la Jefatura, previa coordinación con el Departamento de Prensa y Difusión”.
Todas las dependencias de la fuerza fueron notificadas por escrito y, se pudo saber que quienes desoigan las medidas serán pasibles de sanciones administrativas.
La medida se produce en forma paralela a recientes casos de marcada trascendencia pública como el escándalo sexual del hotel del casino que involucró a dos comisarios y el colapso del puente del arroyo Acaraguá, donde la Policía tenía la misión de controlar la restricción al tránsito.
También habría generado malestar en la cúpula el protagonismo mediático que cobró la oficial principal Nancy Gisel Poliszuk, jefa de la Comisaría de la Mujer de Aristóbulo del Valle, quien días atrás brindó detalles sobre el procedimiento de rescate de una misionera que era sometida por su esposo en Estados Unidos.
“Sea cuál sea el motivo, no podemos llamar a cada rato a prensa de Posadas por algo que pasa en Oberá, en San Antonio o Apóstoles. Es más un mecanismo para ocultar información que otra cosa. Con esta circular somos rehenes de las comisarías y la Jefatura”, reclamó un integrante del Círculo de Periodistas de Oberá.
