"Si el 60 por ciento no nos respalda, nos vamos al mazo", declaró el Presidente de ese país
José Mujica sabía que la apuesta que tenía entre manos era polémica y generaría disidencias internas y externas. A casi un mes de haber hecho pública la intención de que el Estado uruguayo legalice la producción de marihuana, el mandatario puso paños fríos a su propia idea. "Si el 60 por ciento no nos respalda, nos vamos al mazo", afirmó.
Mujica se sorprendió por las repercusiones internacionales que tomó el debate. "El objetivo es que el país entero discuta de manera amplia y profunda. Si planteo la discusión es porque los antecedentes del Uruguay así lo permiten, como la discusión sobre alcohol de principios del siglo XX”, aseguró el Presidente en una conferencia que brindó en una visita al departamento uruguayo de Soriano.
Cuando le consultaron acerca de si el “camino” de la regularización es una solución viable, el jefe de Estado de Uruguay sostuvo que su Gobierno “no tiene un talismán” pero tiene claro que la salida actual no da resultado para paliar el problema de las adicciones. “Ninguna adicción es buena, salvo el amor”, agregó Mujica.
Una encuesta que publicó a fines de junio el diario El Observador de Uruguay reveló que la opinión está dividida. De acuerdo a esos números, frente a la pregunta "¿está o no de acuerdo con la legalización de la tenencia y venta de marihuana?", un 38 por ciento opinó que sería correcto y un 60, que no. Los mayores de 63 años son quienes más se resisten y los jóvenes, quienes más la apoyan.
La intención es ponerle precio, establecer el impuesto a tributar y vender la marihuana en locales habilitados, en los que se llevará un registro de consumidores para impedir conductas adictivas.
Fuente: TN
