(territoriodigital.com) Había sido trasladado de urgencia al Centro Médico Internacional de El Cairo tras sufrir un paro cardíaco y ataque cerebrovascular en prisión
El ex gobernante egipcio, de 84 años, está clínicamente muerto, según la agencia oficial MENA. Había sido trasladado de urgencia al Centro Médico Internacional de El Cairo tras sufrir un paro cardíaco y ataque cerebrovascular en prisión.
Padecía depresión aguda, dificultades respiratorias e hipertensión.