"Esto no se desmadró, esto se apadrinó", sentenció la Jefe de Estado en clara alusión a las ocupaciones de terrenos privados y parques públicos, como el Indoamericano donde los enfrentamientos ya causaron cuatro muertes.
Fernández también se refirió a los cruces que se produjeron entre el gobierno nacional y la administración de Mauricio Macri, y reclamó que "los gobernantes deben ponerse al frente de los problemas y no echarle la culpa a los demás".
En un acto en la localidad de José C. Paz, la Jefe de Estado prometió: "Voy a seguir inquebrantable frente a mi pueblo, gobernando, tomando todos los días la medidas que haya que tomar" y rechazó la postura de los que "piensan que no estando él (por Néstor Kirchner), piensan que les va a ser más fácil" atacar a su Gobierno.
La mandataria agregó: "Díganme si lo han escuchado quejarse alguna vez... quejarse o desfallecer cuando cansado después de trabajar todo el día seguía incansable militando, porque ésa era su vida y por eso murió, porque no descansaba un instante".
Al dejar inaugurado un centro de Documentación Rápida, la Jefe de Estado se despidió de los vecinos: "Yo tampoco voy a descansar porque estoy hecha a su medida. El compromiso de él –por Néstor Kirchner– es lo que me lleva a afrontar con mayor fortaleza cada una de las provocaciones y operaciones de los que ya sabemos quiénes son".
