Alejandro Gamero
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El uso de cocaína y metanfetaminas fue confirmado por choferes de ese país, quienes dicen que la mitad de ellos las toma para no dormirse. Opinaron que su compatriota debe haber estado drogado cuando se estrelló en contramano y provocó 15 muertes
Moisés lleva unos 22 años arriba del camión y Leonardo, casi diez. Se llevan más de 20 años entre ambos, son de distintas generaciones y diferentes empresas, pero tienen en común la cuna brasileña. A pesar de las diferencias de edad y experiencia, llegaron a la misma conclusión sobre la tragedia que dejó 16 muertos en San Martín el pasado 7: “El camionero que chocó en contramano con el colectivo no estaba normal, estaba drogado”.
Las frases de uno y otro fueron casi idénticas, y recalcaron: “Si hubiera estado borracho, se hubiera dado cuenta de que iba en contramano”.
Los choferes consultados explicaron lo de las drogas con el conocimiento de para quien la problemática es moneda corriente.
Leonardo afirmó: “Tomó rebite (remache, en castellano, una anfetamina en comprimido). Es para no dormirse, para tirar más horas, pero a veces te saca. También puede ser que haya tomado alguna droga fuerte que muchos camioneros usan”.
–¿Drogas fuertes? ¿Cuáles?
Cocaína.
–¿Los camioneros de Brasil consumen cocaína?
Sí, sí, es bastante común.
–¿Y lo hacen para soportar las exigencias del trabajo?
No sólo eso, más lo hacen por vicio.
–¿Y muchos camioneros se drogan con ‘rebite’ o cocaína?
Cincuenta por ciento –interrumpe la mujer de Leo, que lo acompaña en el viaje y está al tanto del tema como él.
“Cincuenta y cincuenta”, ratifica el joven camionero.
Moisés, quien comparte la entrevista y ha venido a parar a la misma estación de servicio que Leo, aporta lo suyo ratificando el comentario. “Ese chofer no ha estado chupado (borracho). Hay otras cosas acá”, exclama.
–¿Qué cosas?
El rebite, un comprimido para no dormirse. Cuando tomas mucho rebite, te hace ver cosas, te hace alucinar. O consumió drogas.
–¿Qué drogas?
Cocaína.
“En Brasil, la mayoría de los camioneros la consumen y cuando la toman pierden el miedo. Van arriba del camión y sienten que cualquier problema lo pueden superar”, asegura Moisés.
Entonces reafirmó su conclusión: “Entró en contramano, pasó muy rápido por dos sectores que a 40 kilómetros por hora tumbas el camión y siguió hasta que chocó. Ese hombre no estaba consciente”.
El uso de la cocaína no es casual, ya que –como las anfetaminas– provoca también una quita del sueño y la sensación de mayor resistencia temporal que impulsa a los choferes a consumirla.
Los devastadores efectos
El testimonio a Diario UNO de Moisés y Leonardo (sus apellidos se resguardan), dos camioneros brasileños cuyos dichos podrían sonar exagerados, terminó por confirmarse en organismos especializados y la prensa de Brasil.
El Centro Brasileño de Información sobre Drogas Psicotrópicas (http://www.cebrid.epm.br) indica que el rebite, nombre coloquial que en castellano quiere decir remache, es una anfetamina que induce al “insomnio” y que –como todas las de su tipo– estimula el sistema nervioso central.
Ratifica que es utilizado con gran frecuencia, “especialmente por los conductores que necesitan viajar horas sin descanso, con el fin de cumplir con los plazos”.
¿Estado psicótico?
Los efectos tóxicos del rebite descriptos por el centro especializado encajan en gran medida con la conducta casi suicida desplegada por Genesio Mariano, el camionero que provocó la tragedia, causando 15 muertes y la suya propia tras embestir a un colectivo en San Martín.
La entidad brasileña dice sobre el rebite: “Si una persona exagera la dosis tomando varios comprimidos a la vez, se pone más agresiva e irritable, y comienza a sospechar que otros están conspirando en su contra, lo que clínicamente se llama delirio persecutorio”.
Agrega que, “dependiendo del exceso de la dosis y de la sensibilidad de la persona, puede padecer un verdadero estado de paranoia e incluso alucinaciones. Esto es psicosis por anfetaminas”.
Basta recordar que un testigo denunció ante la policía que antes del accidente vio al camionero alcoholizado, con quien tuvo una discusión, y que éste, descontrolado y borracho, le tiró el camión encima.
En tanto, el hermano de una de las víctimas fatales afirmó que un amigo suyo que trabaja en el galpón de empaque de ajos donde el camionero levantó la carga había estado mezclando pastillas con fernet antes de emprender la partida.
